Relatos con aire lobuno

No todo va a ser ficción. Por eso me adentré en la mitología junto a Pablo Ruiz Osuna y Sonia Gupta Román para investigar sobre el mito del hombre lobo, su origen, evolución y leyendas por todo el mundo. Y de ahí nació el ensayo ilustrado "Hombres lobo y otros depredadores de la mitología, disponible durante tiempo limitado en Verkami (click aquí).

Pero no todo iba a ser ensayo. Por eso me propuse escribir una serie de relatos cortos inspirados en las leyendas que habíamos investigado. Y aquí están:


Él dice que somos la misma cosa: personales y animales. Animales y árboles. Árboles y rocas. Hijos todos de la Madre, alimentados por Su tierra, bañados por el mismo sol.

Él dice que por eso podemos saltar de un corazón a otro, fluir por la savia del tejo vetusto para ver los inicios del mundo, o volar con plumas de ganso hacia septentrión, donde el océano devora a la tierra.

Él dice que el alma más poderosa es la del lobo blanco, el gran cazador que invoca a la luna a gritos, de mordisco certero e infalible en la persecución.

Él dice que estoy preparado: desde que tengo recuerdos, él me ha entrenado para dar este paso. Soltar mi piel frágil para imbuirme en el pelaje duro del cazador.

Él dice que en su forma podré correr hasta el campamento de nuestros enemigos y rondar su cueva, aprovechando cualquier descuido para minar su poder: un niño despistado, algún joven guerrero deseoso de probar su valor.

Pero yo no anhelo la sangre en los dientes ni los gritos de nuestros enemigos.
Yo quiero ser ave canora, para volar a las manos de ella y silbarle mi amor.
.
Él dice que lo hice bien. Me duele la cabeza por las hierbas de la ceremonia. O quizá por apretar tanto la mandíbula hasta que los huesos se empezaron a astillar. Ya no olfateo como anoche, pero puedo oler el humo lejano de las hogueras. Ya no oigo como anoche, y aún así escucho los gritos que acompañan a los muertos al más allá.
.
Ya no quiero ser ave canora, no vaya a saber por los otros pájaros que ella ya no está.


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